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Algunos de los nuestros fueron al Sport Werk de Hamburgo para ver y comprobar que estamos a años luz de squash. En todos los sentidos. Es decir, que mal empezamos. Aunque eso sí, tranquilitos, que salvamos el honor, como ya se verá más adelante.

Acudíamos esperanzados con otros 260 jugadore/as porque el German Masters prometía ser el mejor campeonato del año. La primera visión fue algo decepcionante ya que te esperas ver un recinto moderno y no una nave como tal. Tanto test, tanto test como ponéis…

Esta vez es verdad que las apariencias engañan porque desde el vestíbulo hasta el último rincón era todo perfecto. Quince pistas con una gran distribución, en medio la de cristal -imponente-. Sin estrecheces. Un bar con terraza amplia. Vestuarios con spa y piscina…todo un lujo y una cruda realidad para nuestros ojos.

Nos las prometíamos felices…pero el viernes no fue precisamente bueno. Llevábamos una regularidad casi casi admirable y solo uno se saltó la regla establecida: Nacho Polémic, que ganó sus dos primeras partidas y se plantó en cuartos de final, nada más y nada menos…así que tuvo a bien dejarse fotografiar con los perdedores.

El sábado fue totalmente al revés. Y los resultados se invirtieron. De tal manera que mejor “no fer sang”. Digamos que Nacho pasó de puntillas por la pista de cristal, en streaming y prime time. Hay foto comprometedora que no pasa el filtro, pero se os invita a ver la que ilumina el watshapp de la víctima de Gallagher. ¿Es o no es?

Pregunta de encuesta. ¿Qué es mejor 1 de 5 o 5 de 1? La respuesta parece fácil…y es lo que ocurrió con Soriano y Ferra. Pierden la primera partida y ganan las cuatro restantes. Parece que no queda mal…sin embargo, quedan mejor los que hacen una, la primera, y pierden las cuatro restantes. Cuestión de matices a resolver.

También ganaron partidas Candil, Montoro y Martos con cuadros complicadísimos en +40, +45 y +35 respectivamente.

Pese a tanta partida hubo también tiempo para el turisteo y ¡¡Oh, sorpresa!! Se deja ver por esta sección y hasta se pide perdón por la intromisión.

Y alguien se preguntará: ¿Y eso del honor salvador? Pues sí. Ganamos en algo. En la “party”, en la fiesta del campeonato. Y el vencedor, por aclamación, fue el Tigre de Cullera.  ¡¡Qué exhibición!! Lástima que no haya vídeo de la ocasión. Hubiera sido viral. Una muestra de cómo estaba Jack el Tigre: ¡¡Desatado!!.

Hay que mencionar y destacar la victoria española en + 60 a cargo de Jose Luis Orizaola. Mucho mérito porque iban los mejores de la especialidad. ¡¡Enhorabuena!!

Y mientras tanto, hay quien se plantea cambiarse de club y deporte...

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